Ana Arvizu

Proveniente de una familia de varios estados de la república mexicana trazo su carrera desde sus abuelos y con una cocina muy tradicional, su abuelo José Guadalupe (Tellez, Hgo) la enseñó a amar la milpa y su abuela Angelita Velazquez (El aguacate, Jalisco) a cocinar desde muy niña en el Estado de México (Tlalnepantla).

De sus abuelos paternos tenía herencias ya asentadas de la CDMX aún que ellos provenían de San Miguel de Allende, Guanajuato. Mario Arvizu Quintero y Yolanda Cortes (CDMX con herencia de Veracruz).

Llegó a la edad de 9 años a Baja California en dónde vivía en el municipio de Rosarito en aquellos años donde no había una cultura gastronómica solida, tras su amor por la cultura  decidió estudiar gastronomía en la CDMX pero encontró una escuela en aquellos años que apenas estaba iniciando "culinary" en dónde formó parte de las primeras generaciones de la institución, viajo a ser parte del equipo de Mónica Patiño  en la CDMX , en Barcelona España en Sant cugat del Valles y regresa para concluir sus prácticas con Patricia Quintana en Polanco.

Ana es una rebelde sin causa por lo que viajo a Mérida en dónde solo laboro 6 meses en la hacienda Misne, regresa a BC a trabajar en la Querencia, en ese entonces ubicada en Playas de Rosarito en dónde hace sus primeros pasos como líder de una cocina, trabajo para Alejandra García en UNEA  dónde forja el lado de profesora de gastronomía pero por su corta edad sigue buscando caminos de aprendizaje, después de 3 años regresa a Mérida donde trabaja de la mano del Chef Marcos Marin y Roberto Solis, en una aventura de 2 años y medio conociendo pueblos, cultura, gastronomía, fiestas nativas, gente. Regresa a Baja California, en dónde ingresa a la universidad como Coordinadora de gastronomía al lado de Carmina Miranda donde ganan varios premios como el chile en nogada , aguila dorada en Guadalajara entre otros .

Regresa a los restaurantes y está vez se une al equipo de Hotel Calafia con el famoso Lic Conrado, sigue su camino para los Angeles y regresa muy rápido por un problema de interés, cae en banca rota y el Club de Empresarios de Baja California, cree en su trabajo y empieza de nuevo a formar su camino ya como chef ejecutivo  la incluyen en el Baja Culinary Fest 2018 dónde forjó su estilo de cocina.

Decide abrir su negocio y tiene que cerrar por la inseguridad de la zona, empieza a laborar en Sunio Beach Club (Rosarito) dónde pasó pandemia y colabora con varios chefs de la zona formando parte de la Asociación de Chefs de Rosarito, presedida por el chef Mario Medina.

Como asesora gastronómica participa en la apertura de dos restaurantes, uno en Guatemala y otro en Tijuana. Al mismo tiempo la nombran chef de marca del corporativo, La Corriente. 

Entra a laborar en Fuego Santo y forma parte de la gestión de varios eventos como el Oaxacalifornia.

En Abril 2024 decide emprender a un resort de nuevo en Rosarito y a regresar a cocinar su comida y su esencia

Participaciones